El Coaching es una disciplina que se desarrolla como proceso conversacional en el que la persona (coachee) transita un camino de auto-observación, exploración y auto-conocimiento acompañado por el coach; con la finalidad de identificar su modo de interpretar la realidad, es decir: conocer el tipo de observador que está siendo respecto a si mismo, sus circunstancias, relaciones, etc. A través de distintas herramientas que el coach utiliza en el proceso (siendo la más importante la pregunta) se interpela al coachee a un aprendizaje transformacional que le permita acceder a nuevas interpretaciones y significados de esa realidad, reconocer limitaciones y debilidades así como abrir oportunidades de cambio y mejora.
El aprendizaje al que propende este proceso posibilita acortar la brecha que existe entre el estado presente de la persona (aquella donde su objetivo, meta o situación deseada no se ha materializado) y el estado deseado (objetivo concretado).
Considerando que el coaching es acción, la mejor forma de entender el proceso es experimentarlo. Sin embargo, si aún no has tenido la oportunidad, a fin que puedas ver cómo puede ayudarte en tu desarrollo profesional, te resumo en tres pasos concretos y simples en qué consiste: